Vacaciones de verano

En agosto, como español normal y corriente

coges vacaciones de sol, playa y mar caliente.

Cuerpos con traje de baño, bikini y a teta suelta

puestos al sol, vuelta a vuelta y contravuelta,

playas con sombrillas multicolores

que huelen a sudor, cremas y bronceadores.

Si la marea está alta

el espacio falta:

apretones, arenazos y achuchones

te abres paso a trompicones

sufres balonazos y salpicones

y cuando extiendes los brazos para nadar

un manotazo a alguien puedes dar

y después del remojón

tu toalla buscas desesperadamente

pero no localizas tu ubicación

entre tantas sombrillas, todo lleno de gente

y al fin, después de mucho visualizar

allí, a lo lejos la logras encontrar

llena de arena y semienterrada

por niños pisoteada

para secarte la vas a sacudir

miras alrededor y tienes que desistir

pues estropeas el bronceado

del prójimo que te tiene rodeado

así que recoges tus pertenencias

y al apartemento te encaminas con arena y con paciencia.

Allí te das una ducha gratificante

y después sales a comer a un próximo restaurante

pero no consigues tu objetivo, vana ilusión

resulta que no has reservado con antelación

por lo que resignado y cabreado

te comes un bocadillo en el bar de al lado.

Después de la comida, y para pasar los calores

una siesta destapado y con sudores.

Por la tarde, no más playa, ya está uno saturado

paseas por el lugar, siempre de gente abarrotado

intentas tomar un refresco en una terraza

pero no encuentras libre una sola plaza

y después de mucho paseo y con cierto agotamiento

te vuelves a descansar al apartamento.

Por la noche sales a disfrutar

de las fiestas veraniegas del lugar

llegas al recinto preparado para la actuación

del espectáculo musical de la ocasión

todo lleno de gente, un gran follón

te consigues ubicar en un rincón

por fin suena una música estruendosa

en el lugar donde estás no ves gran cosa

ya estás cansado de tanto oir

y te marchas a dormir.

Vacaciones de verano que calor

sol y mar que es muy sano, si señor

reservados siempre a mano, por favor

turistas y ciudadanos, al pormayor

para el próximo verano, ¡viva el turismo de interior!

2 de agosto de 2007